A un año del accidente

Robert recordó a su familia en fatal curva

 

PERGAMINO, Noviembre 15.-(Semanario “El Tiempo” reproducción de PergaminoCiudad) María Cristina estuvo en el lugar donde toda la familia Pomar se accidentó el año pasado. La madre de Gabriela Viagran quiere que haya justicia contra quienes no encontraron a sus familiares durante 24 días.

 

Ayer se cumplió un año del trágico accidente de la familia Pomar en la curva de Plazibat y la mamá de María Cristina Robert recordó a su hija y su familia en la banquina donde los cuerpos estuvieron durante 24 días sin ser hallados. La mamá de Gabriela Viagrán estuvo en la banquina de la ruta como un acto simbólico y para hacer hincapié en el abandono que sufrieron sus familiares desde que se accidentaron hasta que los encontraron.

 

En este sentido Robert dijo que estaba a la vera de la ruta: “porque fue el lugar donde estu­vieron muertos tanto tiempo los cuerpos de mi hija y mis nietas. Bajo estos árboles estuvieron 24 días desaparecidos. Tiempo durante el cual se dijeron tantos disparates. A mi hija la abando­nó la Justicia que no tenemos los argentinos”.

 

La mujer recibió el apoyo de muchas personas que se trasla­daron hasta el lugar autoconvocados y de forma espontánea para acompañarla. “Acá estaré todo el día para sentir el olor que quedó en el lugar”.

 

La disconformidad de Cristina Robert apunta básicamente a la fiscal Karina Póllice porque, según ella, “no buscó bien y no supo conducir la investigación policial.

 

"La fiscal no supo mandar a los policías a hacer el recorrido que tenían que hacer. La ruta que hacía mi yerno fue la menos rastrillada y recorrida por los uniformados”. Además disparó contra un funcionario del Ministerio de Seguridad porque “me mintió cuando me dijo que 2.500 policías los estaban buscando, que yo me quedara tranquila en mi casa. Yo deseo que Paul Starc esté preso por falso testimonio porque nunca hubo tantos efectivos buscando mi familia. No hay Justicia y por eso Starc no está procesado.

 

“Tengo mucha indignación y hablo desde el dolor que me produce haber perdido a mi hija y mis nietas y que no han sabido encontrarlos a tiempo. Un año después estoy muy dolorida porque me entregaron 24 días después de un accidente a mi hija y mis nietas en un cajón cerrado con un olor desagradable. Ese dolor lo siento acá (por la curva Plazibat) donde se accidentaron, donde puedo revolver con las uñas y sentir donde estuvieron abandonados.

 

“Mi vida está destrozada. Sigo siendo madre y abuela porque tengo dos hijos y dos nietos, pero mi casa ya no es la misma porque quien unía a la familia era mi única hija mujer. Nadie reemplaza a nadie, pero ellas eran mi sol y cuando nos reuníamos éramos felices. Eso ya no existe más. No quiero más reuniones porque no está ella. Perdí todo y sigo viviendo sólo hasta ver la Justicia hasta donde llega.

 

“Durante este año he llegado a extremos, pero ahora estoy lúcida para luchar para que se haga Justicia por mi hija y mis dos nietas”.

 

 Piden traslado de la causa a Mercedes

 

 La causa penal originaria por la desaparición de la familia Pomar actualmente se encuentra en la Cámara de Apelaciones y Garantías en lo Penal porque los jueces Mónica Guridi, Gabriela Jure y Martín Morales deben resolver sobre un pedido de Horacio Villalba abogado del padre del mayor de los hijos de Gabriela Viagran.

 

El letrado que interviene como particular damnificado ha pedido la nulidad de todo lo actuado y que la instrucción sobre el accidente se reinicie en el Departamento Judicial de Mercedes, por ser la jurisdicción correspondiente al lugar del siniestro.

 

La fiscal Karina Póllice y el juez de Garantías Fernando Ayestarán han rechazado este planteo por la innumerable cantidad de pericias que están en la causa, la complejidad de algunas intervenciones científicas que se han realizado en el lugar del hecho y porque sería casi imposible repetir la totalidad de las actuaciones desde cero en un expediente que cuenta con más de dos mil fojas.

 

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