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El municipio adeuda abultada suma en impuestos

Tomó posesión del inmueble en subasta pública, pero no pagó al fisco bonaerense. Arba embargó sueldo y bienes a una de las antiguas propietarias.
Tomó posesión del inmueble en subasta pública, pero no pagó al fisco bonaerense. Arba embargó sueldo y bienes a una de las antiguas propietarias.

PERGAMINO, Julio 05.- (Semanario “El Tiempo” reproducción de PergaminoCiudad) En los últimos días EL TIEMPO tomó conocimiento sobre una situación singular, que tiene que ver con el estado registral del ex edificio del cine San Martín de nuestra ciudad. Si bien las partes involucradas –los antiguos propietarios del inmueble (tres familias de nuestro medio)- prefieren por el momento no participar públicamente de la cuestión, una de ellas, se ve afectada toda vez que el fisco bonaerense (Arba) ha trabado embargo sobre el salario que percibe por su trabajo diario y al parecer algunos bienes inmuebles de su propiedad, por falta de pago del tributo inmobiliario que debe abonarse por el edificio donde funcionara en su momento el cine San Martín.

 

La cuestión de marras adquiere relevancia considerando que la Municipalidad de Pergamino adquirió el bien en el año 2003 mediante subasta pública, con la salvedad que se haría cargo de los impuestos, tasas y contribuciones que pesaban sobre el inmueble y los que se generen hasta el momento de escriturar como así también los gastos de escrituración. En ese momento (lunes 30 de junio de 2003) a título informativo, la deuda equivalía a “rentas: $103.654,39 hasta el día 5-02-03, municipales $48.208,19 hasta el 20-02-03. El comprador deberá abonar el saldo de precio dentro de los treinta días corridos de la fecha de remate, cualquiera sea el estado del expediente o de los recursos que se planteen, Pergamino 26 de mayo de 2003” ; según reza el edicto judicial.

 

Falta de pago

 

Ahora bien. ¿Qué sucede con la situación planteada? Es la pregunta que muchos se harían al tomar conocimiento de esta cuestión. Diversos chequeos periodísticos realizados por EL TIEMPO dan cuenta que el municipio no abonó las deudas tributarias descriptas, razón por la cual el inmueble no fue escriturado en tiempo y forma, y la deuda se fue incrementando hasta llegar a una cifra abultada en la actualidad que ascendería, pesos más o pesos menos, a poco más de 200 mil pesos; deuda que la Agencia de Recaudación de la provincia de Buenos Aires (Arba) reclamó mediante diversas intimaciones en un principio, dándose todos los pasos legales que se producen en estos casos, hasta llegar a trabar embargo sobre los bienes de los propietarios que son titulares registrales para el fisco, en este caso ante la ausencia de la escrituración.

 

Interrogantes

 

¿Existe una gravedad ante estos hechos? Sería el interrogante que podríamos plantear. En principio podríamos preguntarnos ¿porqué el municipio no cumplió con lo expuesto en la ley dando cumplimiento al pago de la deuda tributaria que le correspondía por la compra en subasta pública y así poder escriturar y evitar un perjuicio a terceros (en el caso que nos ocupa, hasta el momento a una de las partes vendedoras)? ¿Hubo desidia, desprolijidad o algún otro motivo de los funcionarios de las áreas municipales que tenían a su cargo el tratamiento de este tema cuando la Municipalidad decidió adquirir el inmueble de calle San Martín para la futura construcción de un teatro, que dicho sea de paso, se está trabajando en ello? ¿El Concejo Deliberante, que tiene a su cargo, entre otros aspectos, el contralor de las acciones del Ejecutivo Municipal, nunca se enteró o tomó conocimiento de esta situación? Está claro que el inmueble fue adquirido por el municipio y tomó posesión del mismo dentro de los marcos legales. Aquí no se cuestiona ninguna anomalía legal, ni mucho menos, ni por asomo siquiera. Pero sí tal vez un grado de responsabilidad por parte de quienes la tienen, en resolver el estado del inmueble en el momento que debió hacerse.

 

 Y no se trata tampoco de salir en defensa de nadie, en relación al embargo que pesa actualmente sobre una de las anteriores familias propietarias. Ellos sabrán, desde el punto de vista legal qué es lo que corresponde, de hecho hay un estudio letrado trabajando en ello que ha solicitado el embargo del inmueble. Sí creemos que el acento debe ponerse sobre el municipio, atento a que debería poner mayor celeridad en las actuaciones de los funcionarios, tomando en cuenta que pasaron siete años desde el 2003 cuando la Municipalidad compró el inmueble y no agilizó los trámites para abonar las deudas de las que debía hacerse cargo al momento de su adquisición.

 

Por otro lado la escribanía a la cual le tocó en sorteo tomar el expediente, tenemos conocimiento –aunque no es posible hacer las consultas a la misma ya que los actos que realiza no los puede exponer públicamente, y es lógico que así sea- actuó en concordancia con lo que le corresponde hacer ya que la transferencia del inmueble se produce en el mismo expediente judicial. Hay un acta donde se protocolizan las actuaciones, no es una escritura de transferencia del dominio. Incluso tendría pedido el expediente en préstamo para pasar el informe al juez porque no se pudo hacer la escritura en el 2005 y al parecer tampoco se podría realizar ahora.

 

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