Cien ejemplares de ocho especies nativas distintas se integraron al arbolado público en la vera del Arroyo Pergamino: espinillo, tala y molle (oriundas de la ecorregión del Espinal bonaerense); además de tipa, aguaribay, jacarandá y timbó (pertenecientes a la región de las Yungas norteñas).
Esta acción de plantación comunitaria, llevada adelante por voluntarios, integrantes de la Comisión del Arbolado Público y alumnos de la EES N° 502 y el CFI, se integra al Programa de Ciudades de Biodiversidad convocado por la Red de Innovación Local (RIL).
“Hoy estamos plantando ejemplares adquiridos por el Municipio y otros donados por los viveros del Ministerio de Ambiente provincia. Esta experiencia de trabajo tiene que ver con aprender estrategias de planificación conjunta, generando etapas de codiseño con los vecinos y las instituciones de la localidad” explicó el director de Espacios Verdes, Diego Basanta.
Así se convocó a las dos escuelas vecinas al terraplén “porque ellos usan este espacio para salir de la escuela e irse a sus casas, es un camino que recorren habitualmente y cuando hicimos la etapa de codiseño de esta plantación, junto con los chicos empezamos a pensar en remodelar, refaccionar y entender cuáles eran las necesidades del espacio. Escuchar las voces de los chicos fue fundamental porque ellos pudieron aportar lo que vivían diariamente transitando este espacio y también nos fueron contando cómo creían que era valioso enriquecerlo para poder aprovecharlo en las salidas que hacen con la escuela”, explicó la Subsecretaria de Educación, Luciana Sánchez.
“Venimos trabajando para que Pergamino cuente con un espacio donde atraiga biodiversidad a través de las diferentes intervenciones que se le va a dar. La primera intervención es en el Arroyo Pergamino, entre Rocha y el puente del Ferrocarril Belgrano, con árboles nativos que van a brindar sombra, altura y flores de diversos colores que van a atraer mariposas, aves e insectos polinizadores”, explicó Valeria Pereyra, directora de Gestión Ambiental.
Las especies nativas se adaptan mucho mejor a nuestro lugar y garantizan, por el tipo de frutos y por el tipo de flores, la proliferación, no solamente de aves, sino de insectos polinizadores, que le van a dar a este lugar una dinámica distinta. “Este espacio pronto brindará una alternativa para poder observar aves que habitualmente no vemos en el centro de la ciudad o en los lugares que habitualmente recorremos y también esperamos fortalecer la diversidad de mariposas por las floraciones que tenemos en el lugar. El espacio fue pensado y diagramado para los vecinos y hoy se puede observar en la participación de los voluntarios plantando y haciendo realidad este proyecto”, cerró Basanta.
