El ministro de Desarrollo de la Comunidad bonaerense, Andrés “Cuervo” Larroque, habló en el streaming Uno Tres Cinco y dejó declaraciones contundentes sobre la interna del peronismo en la provincia de Buenos Aires. En un análisis que combinó respaldo a Axel Kicillof y críticas a la conducción del PJ bonaerense, Larroque también lanzó dardos hacia otros referentes del espacio, pidiendo una mayor madurez política.
Larroque subrayó la importancia de fortalecer la figura del gobernador Axel Kicillof, a quien calificó como un pilar esencial del peronismo provincial. “Si Axel se fortalece, ya es visto con preocupación, con desconfianza. Pero hay que cuidarlo; su fortaleza debería alegrarnos, no ponernos nerviosos”, aseguró.
El ministro criticó lo que llamó "gobiernos tercerizados" y sostuvo que Kicillof debe ejercer plenamente su liderazgo: “Si el pueblo de la provincia lo eligió, tiene que asumir esa responsabilidad, dialogando con todos los sectores”. Además, destacó el respaldo que Cristina Fernández de Kirchner debería darle al gobernador: “Cristina tiene un rol clave que jugar en este proceso”.
En referencia a la conducción del PJ bonaerense, Larroque fue categórico: “Este año hubo una sola reunión del Consejo del PJ, el 24 de febrero. Me parece que debería haber más encuentros, sobre todo con las cosas que están pasando”. También dejó entrever un distanciamiento personal y político con Máximo Kirchner, aunque aclaró que mantiene “aprecio, cariño y afecto” hacia él.
Según Larroque, la falta de una estructura clara en Unión por la Patria y la pasividad del PJ bonaerense dificultan el fortalecimiento del espacio. “Necesitamos madurar. Si cada uno actúa según su perspectiva, esto se traduce en problemas para construir un armado electoral sólido”, afirmó.
El ministro también recordó el rol que jugó Jorge Ferraresi, exintendente de Avellaneda, en el ascenso político de Mayra Mendoza en Quilmes: “Ferraresi fue fundamental para que Mayra sea intendenta. Jugó a fondo para ayudarla”. La mención no pasó desapercibida, en un contexto donde la relación entre Mendoza y algunos referentes del espacio muestra señales de tensión.
Larroque cerró su intervención subrayando la necesidad de un liderazgo político claro dentro del peronismo bonaerense: “El poder no se comparte. Hay momentos en los que alguien tiene que tomar decisiones. Debilitar a esa figura es un problema porque la gente votó algo claro”.
Con estas declaraciones, Andrés Larroque no solo marcó la cancha en la interna peronista, sino que también dejó en evidencia las tensiones que atraviesan al oficialismo en la provincia, en un año cargado de desafíos políticos y electorales.