La violencia de género continúa siendo un acto de violencia machista ineludible en Argentina, y las cifras de femicidios no dejan de alarmar. Según el Observatorio "Ahora Que Sí Nos Ven", durante los primeros días de enero de 2025, se reportó un femicidio cada 20 horas. 

Este comienzo de año, según informó www.laotracara.info, reafirma una tendencia que ya en 2024 había evidenciado la persistencia de la violencia extrema contra mujeres y diversidades en el país, con 267 femicidios registrados, una muerte cada 33 horas.

A pesar de los discursos oficiales que buscan minimizar el impacto de esta problemática, el panorama es desolador. Las organizaciones sociales denuncian un contexto de retrocesos en materia de género, reflejado en la falta de recursos, el desmantelamiento de políticas públicas y los recortes presupuestarios en áreas destinadas a la prevención y asistencia. Además, destacan que la violencia institucional, representada en discursos misóginos desde altos cargos, exacerba aún más este flagelo.

Retrocesos en políticas de género y contexto actual

En el primer año de gestión del actual gobierno, se percibió una disminución en la visibilización mediática de los casos de femicidios. Este subregistro no solo refleja una escasez de cobertura, sino que también dificulta el diseño de estrategias efectivas para abordar el problema. La reducción presupuestaria y el vaciamiento de programas específicos contra la violencia de género han profundizado las desigualdades estructurales que enfrentan las mujeres y diversidades.

La situación también está marcada por la expansión de nuevos contextos de violencia, como los femicidios relacionados con el narcotráfico, en los que las mujeres son utilizadas como "moneda de cambio" o víctimas de venganzas entre bandas. Durante 2024, 12 mujeres y diversidades fueron asesinadas en este contexto, dos de ellas menores de edad. Estos casos apenas logran repercusión mediática y suelen ser invisibilizados como crímenes de género.

Por otro lado, el informe también subraya la problemática de los femicidios suicidas, como los de Belén Arce y Micaela Santander en diciembre de 2024, quienes fueron llevadas al límite por parejas violentas. Estos hechos evidencian la urgencia de implementar políticas integrales que consideren la prevención y asistencia en todas las dimensiones de la violencia de género.

Algunos datos para entender mejor la problemática

Femicidios en 2024: 267 (1 cada 33 horas).

Intentos de femicidio: 319 (directos y vinculados).

Femicidas pertenecientes a fuerzas de seguridad o armadas: 13.

Niñxs huérfanxs por femicidios: 267.

Víctimas que habían realizado denuncias previas: 19%.

Víctimas con medidas de protección: 9%.

Femicidios vinculados al narcotráfico: 12 (2 menores de edad).

Femicidios en diciembre de 2024: 33.

El Estado debe garantizar el cumplimiento efectivo de las leyes y tratados internacionales de derechos humanos que protejan a las mujeres y diversidades. Las cifras y los relatos detrás de cada caso dejan en claro que no es momento para discursos vacíos, sino para acciones concretas que enfrenten la violencia machista de manera integral y sostenida.