El diputado provincial del GEN-Progresistas, Jorge Santiago, presentó un proyecto de Ley que crea el Programa Provincial de Recolección, Acopio, Transporte y Tratamiento final de pilas y baterías. Los municipios dispondrán de contenedores móviles.

Prosiguiendo con un tema medioambiental tan importante, que lo llevó a presentar hace 15 días un reconocimiento a la primera planta de reciclado de pilas de la Argentina, la Planta Piloto Multipropósito y Laboratorio de Servicios a la Industria y al Sistema Científico (ubicada en La Plata), el legislador nacido en Rojas ingresó otra iniciativa que aborda el complejo tema de las pilas/baterías.

En esta ocasión, Santiago redactó una ley que crea en territorio bonaerense el “Programa Provincial de Recolección, Acopio, Transporte y Tratamiento final de pilas y baterías”, con el objetivo de “preservar el medio ambiente y dar un correcto tratamiento a esos residuos tóxicos”, aclaró.

Hay un artículo donde se explicita que mediante este Programa se deberá proceder a un accionar concreto: “entregar contenedores móviles a los municipios, a fin que lo dispongan en las áreas que destinen a la recolección; realizar campañas de concientización y promoción del reciclado de pilas y baterías; incentivar actividades vinculadas a la investigación y generación de proyectos con el fin de fortalecer el reciclado y tratamiento de las pilas y baterías; articular entre provincia y municipio para costear un transporte que lleve las pilas y baterías a su destino, donde se les dará el tratamiento final”.

Además de facultar el Poder Ejecutivo para que designe “a la autoridad de Aplicación” de esta ley, se aclara que “los gastos que demande el cumplimiento de la presente norma serán imputados de las partidas presupuestarias que establezca el Poder Ejecutivo”.

Santiago, quien ocupa la Vicepresidencia II de la Cámara baja provincial, recordó una vez más que “al término de su vida útil, las pilas y baterías son consideradas residuos peligrosos. Al ser desechadas junto con la basura doméstica, ocasionan graves daños a la salud y al medio ambiente debido a los materiales químicos que contienen”.

Entre los metales que contienen se encuentran el mercurio, cadmio, plomo, zinc, manganeso y litio. “De acuerdo con Greenpeace -destaca el proyecto- el 30 % de su contenido son materiales que causan daños a la salud y el medio ambiente”, detalló.

Lamentablemente, en la Argentina cuando una pila ya no sirve se la tira junto con la basura domiciliaria y termina en rellenos o basurales a cielo abierto. Con el paso de tiempo y por descomposición, sus elementos se oxidan y derraman diferentes tóxicos en el suelo, agua y aire.

El representante por la Segunda Sección en la Legislatura, hace hincapié en que “la disposición final de las pilas agotadas constituye un problema ambiental serio, tanto por su magnitud, como por la escasez de alternativas viables desde el punto de vista ambiental, social o económico”.

Tras precisar que “solo la Ciudad de Buenos Aires hoy en día cuenta con un plan de recolección de pilas, y en el resto del territorio la competencia recae sobre cada municipio, pero es poco lo que se hace”.

Santiago finaliza estimando importante que mediante este Programa “la Provincia destine fondos para los mismos, y que la creación de la Planta de reciclaje este acompañada de políticas ambientales tendientes a reducir estos residuos, altamente contaminantes”.