Se llevó a cabo la tercera marcha por pedido de justicia por los fallecidos en la Comisaría Primera. Amigos y familiares se reunieron frente al Municipio y marcharon por el centro de la ciudad.

En el marco de la nutrida manifestación integrada por familiares y allegados, con remeras y pancartas alusivas, Diego Filiberto, hermano de Sergio, expresó que “queremos saber la verdad de lo que pasó y que se haga justicia”.

“Las pericias demostraron que la Policía no hizo nada, que los dejaron morir, no prendieron las duchas ni les abrieron las puertas a los bomberos. A Nosotros nadie nos comunicó nada y muchos familiares llegaron antes que los bomberos, inclusive que la ambulancia”, añadió.

Para todos los reunidos, hay una cosa que está clara. “Los dejaron morir solos, la policía no hizo nada”, relataba Diego con una foto de su hermano en la mano “muchos  piensan siete negros menos es mejor, para nosotros obviamente que no”.

Eran muchos los que iban llegando a la plaza con el correr del tiempo. “Estoy acá no solo por el daño que le hicieron a los chicos sino también a mi mamá, ella hizo un retroceso mental. Parece una nena de dos años, a la que la tengo que bañar, le tengo que dar de comer en la boca y todo por el mal accionar de los que debían cuidar la integridad física de los chicos adentro, de los que debían tratar de educarlos para que salgan a la sociedad sin causar le daño a nadie”, decía entre lágrimas Daiana Perrota, hermana de Federico.

Los familiares dejan en claro que las marchas seguirán hasta que la justicia llegue, mientras tanto el fiscal Nelson Mastorchio continúa con su trabajo.