El hecho ocurrió el primer fin de semana de marzo, cuando Pablo Giménez festejaba el cumpleaños de su hija e invitó a una nena se encontraba pidiendo comida. Los dueños del restaurante le dijeron que no se podía quedar, por su vestimenta.
Este desagradable episodio tuvo lugar en el tenedor libre ubicado en calle Merced entre Avenida de Mayo y Pinto. Pablo se encontraba en el lugar festejando el cumpleaños de su hija cuando una menor ingresó el local pidiendo comida.
Al ver la situación, la invitó a quedarse a comer con su familia y ser parte del festejo. Uno de los dueños del tenedor libre, conocido como “los chinos” se acercó y le pidió que se retirara del lugar.
Oponiéndose firmemente a esta medida, Pablo aclaró que iba a pagar por la menor y comenzó una discusión con el dueño del lugar. “Él me responde que no era bienvenida a ese lugar por como vestía y en las condiciones que se encontraba”, detalló.
Al finalizar el relato, expresó que terminó “la noche tranquilo porque pude sacarle una sonrisa a la nena” ante un claro hecho de discriminación.