Franco ya agotó todos sus recursos. En el último año y medio sufrió cinco robos. Cuatro de ellos este 2021. No hay respuestas desde el área de Seguridad y ya no tiene más métodos de protección.
“No doy más, estoy totalmente agotado, es la quinta vez. La primera me robaron todo, me cortaron el alambre y rompieron la reja, yo ahí ya tenía perro, alarma, todo, después de eso levanto un tapial, lo saltan y vuelven a entrar, hace dos semanas me robaron la máquina de cortar pasto, no pudieron entrar por los sensores que empezaron a sonar”, detalló.
Pero no fue solo eso, sino que este fin de semana ocurrió de nuevo: “Me llaman 22:40 horas que habían sonado los sensores. Yo estaba comiendo con dos amigos, llegue y me encontré con las rejas abiertas, tengo doble reja. Estoy pagando los televisores que me robaron”.
Ubicado en calle De la Cruz Gorordo, frente al campo de deportes del Banco Provincia, Franco lleva la ropa arriba del auto por miedo a quedarse sin nada.
“Tengo los videos y veo la impunidad, la policía es muy poco empática, cuando llegás te dice que saben quiénes son”. Y el hecho incluso ocurre una y otra vez.
Ahora se plantea la posibilidad de mudarse de su casa. “Trabajo todo el día y estoy chequeando todo el tiempo las cámaras por las dudas”, cerró.