La Subsecretaría de Inspección General y Tránsito informó que se han intensificado los controles de alcoholemia durante los fines de semana, como así también en vísperas de feriados.
En un importante trabajo por parte del personal municipal del área de Tránsito se han labrado numerosas infracciones por alcoholemia positiva, constatándose en las mismas varias con un dosaje arriba de 1.60 mg/l (gramos de alcohol por litro de sangre).
“Debemos entender como sociedad que alcohol y conducción no son compatibles y que el alcohol juntamente con las distracciones y el exceso de velocidad constituyen el principal factor de riesgo en la conducción. Por tal motivo, intensificamos los operativos de fiscalización y control, acompañándolos de una campaña en los distintos medios de comunicación para concientizar a la ciudadanía de los riesgos que conducir en estas condiciones implica”, señaló el subsecretario de Tránsito, Marcos Turrini.
Asimismo recordó que “En Pergamino rige alcohol cero, por eso es que también se ha acrecentado el nivel de positivos en los test que realizamos, sin embargo, se han registrado dosajes por encima del 1.69, lo que implica un riesgo extremo de terminar gravemente herido o perder la vida. Sin embargo no es necesario alcanzar estos altos grados de alcoholemia en sangre para aumentar los riesgos de ocurrencia de un siniestro vial. Los estudios de la OMS demostraron que a partir de un consumo de alcohol de 0.1 a 0.5 gr/l de sangre ya se comienzan a producir efectos sobre el organismo que resultan negativos para la conducción. Entonces, ¿Por qué debe evitarse el consumo de alcohol al conducir? Porque el alcohol disminuye los reflejos, altera la percepción de las distancias, aumenta la sensibilidad a la luz, reduce el campo visual, entre otros efectos”.