El local de juegos es una de las principales fuentes de trabajo de la ciudad. Llegó a tener más de 400 empelados y en los últimos meses fueron cesanteados cien.
La situación laboral es crítica y quienes aún continúan con el trabajo temen que la metodología continúe y sigan con los despidos. Hasta el momento fueron cien los empleados que fueron notificados y quienes ocupan cargos importantes temen que puedan continuar.
En un principio, fue la reducción horaria. Las jornadas ahora se llevan a cabo por seis horas y quienes trabajan llegan a diario con el temor de ser notificados en ese momento, metodología que se utiliza para garantizar de que el trabajador no pueda decir que no estaba al tanto de la situación.
La crisis golpea a todos los sectores y en la ciudad el numero de despidos crece y se cree que la situación puede empeorar.