El último 26 de diciembre se cumplieron dos años de la última inundación y la Cosopper recordó la fecha lamentando la falta de obras y algunos compromisos asumidos no cumplidos.
La última inundación dejó bajo el agua no sólo a los barrios periféricos y los que están sobre la ribera del arroyo, sino también una gran parte de la zona centro. El desastre implicó cientos de familias damnificadas y una suma importante de dinero para el municipio en subsidios.
La polémica se extendió a lo largo de todo el año y la promesa mayor por parte del Municipio fue la obra de la presa reguladora que comprendería Pergamino y toda la región. Desde la Cosopper informaron que seguirán de cerca y “velando por que se cumpla la construcción de la presa de regulación, el sistema de alerta temprana y mantenimiento de desagües”.
En esta ocasión fue el mercado navideño que se realióo el último fin de semana sobre el arroyo lo que no cayó bien, ya que se decoró el lugar y se utilizaron palabras como “paz” y “unión” sintiendo los integrantes que estas acciones y la falta de obra lo único que hacen es generar mayor desigualdad y “enfrentarnos como pueblo”.
Finalmente el 2018 se termina y la obra anunciada a principio de año todavía no tiene fecha de inicio.